Querido Miguel:
He conocido la noticia del estrangulamiento económico, por parte del Ayuntamiento de León, del Festival de Música Española, en el que alguna vez colaboré hace años, con el mismo horror que estoy recibiendo otras muchas parecidas. Ante la difícil crisis que padecemos, la clase política que nos desgobierna, sea del partido que sea, ha decidido que es mejor cortar los árboles sanos que limpiar y tirar a la basura la mucha sucia hojarasca que patrocinan y de la que ellos mismos se nutren. Lo siento mucho, porque la supresión del Festival, que caminaba ya hacia sus bodas de plata, hará más pobre a León, a Castilla-León y por lo tanto a España. Con estos tristes sentimientos, le ruego que acepte mis saludos,
Antonio Gallego
Real Academia de Bellas Artes de San Fernando
(Madrid)